El lavado de manos y de dientes son dos de las prácticas de higiene más importantes que enseñamos en Alaria. Sabemos que inculcar estos hábitos desde temprana edad es crucial para prevenir enfermedades y mantener una buena salud oral.

• Lavado de Manos: En Alaria, los niños aprenden a lavarse las manos en momentos clave del día: antes de comer, después de ir al baño y al finalizar actividades al aire libre. Les enseñamos la técnica correcta para un lavado efectivo, asegurándonos de que lo hagan de manera autónoma, pero siempre bajo la supervisión de nuestros educadores.
• Cuidado Dental: Después de la comida, los niños más mayores participan en una rutina de cepillado de dientes. Les ayudamos a hacerlo correctamente para que acaben haciéndolo de manera autónoma, cada día, a la misma hora, como cualquier otra rutina. El objetivo es que adquieran una costumbre que mantendrán a lo largo de su vida, entendiendo la importancia de cuidar su sonrisa desde pequeños. Con los niños más pequeños, hacemos hincapié en la alimentación sana y la necesidad de proteger sus dientes de golpes y objetos que puedan llevarse a la boca, evitando el chupete y el biberón más allá de la edad recomendada.

El descanso es esencial para el desarrollo físico y emocional de los niños. En Alaria, damos gran importancia a las siestas como parte de la rutina diaria. Después de la comida, los niños disfrutan de un tiempo de descanso en un ambiente tranquilo y seguro, donde pueden relajarse y recuperar energías para el resto del día.

La hora de la siesta se organiza de manera que cada niño pueda descansar en su propio ritmo. Se preparan los espacios con colchonetas, luces suaves y música relajante para que el ambiente sea propicio para el descanso. Sabemos que un sueño adecuado influye directamente en el humor, la concentración y el desarrollo cognitivo de los niños.

Incorporar estas rutinas de salud, higiene y sueño en la vida diaria de los niños les proporciona una estructura que les da seguridad y confianza. Además, les ayuda a desarrollar autonomía y responsabilidad en el cuidado de su bienestar. A largo plazo, estos hábitos se traducen en una mejor salud física y emocional, y en una base sólida para su futuro desarrollo.

En Alaria, estamos comprometidos con la formación integral de los niños, y estas rutinas son una parte esencial de nuestro enfoque educativo. A través de la práctica constante y el refuerzo positivo, ayudamos a que los niños adopten estos hábitos saludables de forma natural y con alegría, sabiendo que lo que aprenden hoy les acompañará toda la vida