Cómo acompañamos la transición de los 2 a los 3 años: el cambio de ciclo o etapa educativa
El paso al segundo ciclo de Infantil es una transición emocional, pedagógica y humana que, como cualquier cambio en Educación Infantil, debe ser amable y .
Cumplir 3 años es mucho más que soplar una vela extra. Es un punto de inflexión: los niños empiezan a mostrar una autonomía nueva, a construir frases más complejas, a desarrollar el pensamiento simbólico y a hacerse preguntas que sorprenden… incluso a los adultos. Pero también es una etapa de grandes retos emocionales: nuevas rutinas, cambio de espacios, mayor exigencia y, en muchos casos, nuevos compañeros y profesores.
En Alaria, somos muy conscientes de que este paso puede ser un momento delicado si no se acompaña con mimo. Por eso, hemos diseñado un modelo de transición que va mucho más allá del simple cambio de aula: es un proceso progresivo, afectivo y cuidadosamente planificado, donde cada niño y niña se siente acompañado, escuchado y preparado para su nuevo camino.
¿Cómo lo hacemos?
En el caso de Alaria, el paso de 2 a 3 años suele ser muy suave y con mucha continuidad.
🎨 1. Proyectos compartidos entre etapas
Cada curso pensamos una temática de da lugar a tres proyectos muy participativos por parte de los niños, en los que colaboran entre las clases. Además, solemos celebrar los días internacionales con actividades, momentos y trabajos colaborativos entre las edades. Por ejemplo, el Día de la Paz creamos un mural común entre todas las clases,; la víspera de San Isidro, hacemos un concurso se mantones entre todos y los mayores hacen limonada para los pequeños; el huerto es un trabajo colaborativo, así como la decoración de la escuela. Esto genera vínculo y sentido de continuidad.
🎨 2. Proyecto CRuSh
Nuestro proyecto CRuSh (Clap Run Shine) está pensado para realizar actividades deportivas por equipos, en los que estén los niños de diferenten edades mezclados, o por parejas en las que los más pequeños estén mentorizados por más mayores. En este proyecto es tan importante participar como animar y celebar los logros propios y ajenos con deportividad.
🎒 3. Rituales de despedida y bienvenida
Organizar un acto simbólico al final del curso para cerrar la etapa es una manera de despedirse para avanzar. También puede haber un ritual de bienvenida al llegar en septiembre que refuerce la pertenencia al nuevo grupo. En Alaria, en el curso de 2 años, los alumnos comienzan su participación en los teatros junto a todo el segundo ciclo. Los niños de 5 años presentan el show de Navidad y el de Verano, en el que, cada clase, incluidas las de 2 años, lo que es una manera de hacerles sentir que ya son mayores y que están perfectamente preparados para un paso más y pertenecer al segundo ciclo.
🌉 4. Interschool Days con los niños de 2 años de Serrano y Nuevos Ministerios
La escuela de Serrano tiene la particuaridad de estar especializada solo en primer ciclo, por lo que, los niños de 2 años suelen pasar a Alaria Nuevos Ministerios cuando cambian de ciclo. Esto, lejos de ser un handicap, enriquece muchísimo la tansición, ya que nos abre posibilidades como las jornadas intercentro. En ellas, los peques de 2 años salen de excursión a la nueva escuela, donde serán mentorizados por un niño de 5 años, conviviendo todo el día y participando en actividades colaborativas especialmente diseñadas para ellos.
👦👧 5. Mentorización emocional
Durante estas visitas y las actividades CRuSh, los niños de 5 años ejercen de “hermanos mayores”, acompañando a los más pequeños en dinámicas compartidas, juegos, talleres… Se crean vínculos espontáneos y seguros que les ayudan a confiar en el entorno.
🏠 6. Conocer antes de llegar
Los espacios de todas las escuelas Alaria siguen la misma estética y son muy parecidos. Además, al mantener la misma estética, las rutinas y las metodologías y un proyecto conjunto entre las cuatro escuelas, si algún niño cambia de centro, por ejemplo, por una mudanza, apenas notan el cambio en nada más allá de su tutora y los compañeros, haciendo que la adaptación sea mucho más rápida y eficaz de lo esperado.
💬 7. Comunicación con las familias
En el caso de que cambien de centro y con el fin de que las familias comprueben la familiaridad del entorno y superen ese posible miedo a que el niño sufra con el cambio, organizamos reuniones presenciales en el nuevo centro para las familias, donde explicamos con detalle cómo será la nueva etapa, resolvemos dudas y mostramos cómo se vive el segundo ciclo en Alaria.
🧸 8. Permitir objetos de apego
Durante los primeros días en el nuevo aula, permitir que los niños lleven un objeto personal o de apego (peluche, pañuelo, foto…) puede ayudarles a sentirse más seguros y protegidos. Cualquier cambio es una nueva adaptación y el obejero de apego siempre es un ancla que facilita rutinas como la siesta o los momentos de frustración, de vergüenza o de tristeza.
🍽️ 9. La comida… sigue sabiendo a casa
Aunque parezca una tontería, no lo es. Que los sabores no cambien es un ancla emocional muy potente: lo que les gustaba en Serrano les seguirá gustando en Nuevos Ministerios… y lo que no, quizá reciba una segunda oportunidad. Al tratarse de cocina central, la comida de ambos centros se elabora en el mismo lugar, por lo que los sabores y las texturas permanecen.
Además, el momento de la comida y del sueño suele ser especialmente sensible para los más pequeños. Que el horario, las hamacas y las rutinas se mantengan sin alteraciones ayuda a que el cuerpo y el corazón se relajen. Saben a lo conocido. Saben a hogar.
📝 10. De tutora a tutora
En Alaria, propiciamos momentos en los que las tutoras puedan compartir información clave sobre los niños para que la nueva tutora pueda ofrecer seguridad y coherencia tanto al niño como a la familia.
Los cambios bruscos generan inseguridad
Cuando las transiciones educativas se hacen de forma repentina, sin preparación ni acompañamiento emocional, los niños pueden experimentar retrocesos en su desarrollo, inseguridad afectiva o incluso rechazo al nuevo entorno. No lo expresan con palabras, pero su cuerpo y su comportamiento hablan por ellos: llanto al llegar, pérdida de apetito, dificultad para dormir, irritabilidad…
En cambio, cuando los cambios se anticipan con respeto, cuando se explican, se viven y se sienten como una evolución natural y no como una ruptura, los niños florecen. Por eso, en Alaria el tiempo emocional tiene tanto valor como el tiempo curricular.
Acompañar es sostener.
Preparar es amar.
Y anticipar es cuidar.
Otras maneras de acompañar la transición de los 2 a los 3 años desde la familia
📖 1. Cuentos personalizados sobre el cambio
Crear o utilizar cuentos protagonizados por personajes que viven un cambio similar al de los niños: nueva clase, nuevos amigos, nueva profe. Los cuentos permiten hablar de miedos, ilusiones y dudas desde la empatía y el juego simbólico.
🤗 2. Visitas en pequeño grupo
Realizar visitas al nuevo centro o aula en grupos reducidos para que el niño pueda explorar el espacio sin agobios, acompañado por su familia y un educador de referencia. Cuanto más tranquilo y personal sea el primer contacto, mejor será la adaptación.
🪞 3. Recorrido virtual y visual
Mostrar a los niños fotos del nuevo centro, de la tutora, del aula, del patio… Incluso hacer uso del recorrido virtual de la escuela para que los padres lo usen durante el verano como herramienta de anticipación emocional.
Creamos puentes bien construidos, porque crecer no debe dar vértigo
Sino ilusión, seguridad y muchas ganas de descubrir.
En Alaria, no creemos en los saltos al vacío. Creemos en los puentes bien construidos: pedagógicos, afectivos, humanos.
Y por eso, cada vez que un niño cambia de etapa, lo hace sabiendo que sigue en casa.
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