Aprender jugando con robots

Niños de uniforme sentados en círculo en la escuela infantil de Madrid Alaria International Nursery School Bernabéu. Robótica e inteligencia espacio visual y lógico-matemática. Educación STEAM. Niño sonriendo.

De forma pionera en España, introducimos en nuestro proyecto curricular un programa de trabajo S.T.E.A.M. (Science – Technology – Engineering – Math) y de introducción a la robótica educativa a partir de los 2 años. Si bien todavía no es habitual su aplicación en el mundo de la educación infantil, trabajar S.T.E.A.M. y en particular la robótica ofrece innumerables ventajas para vuestros hijos:

  • Ayuda al niño al pensamiento lógico y a la definición de estrategias para la resolución de problemas.
  • Permite trabajar en el niño la secuenciación, contrastes, conceptos matemáticos… aún cuando tiene sólo 2 años.
  • Favorece el trabajo cooperativo entre los alumnos y la interacción entre compañeros en la búsqueda de un objetivo común.
  • Expone al niño a un entorno tecnológico adaptado a su edad, pero que le permite familiarizarse desde pequeño al mundo de la robótica y las nuevas tecnologías.
  • Crea un ambiente ilusionante para el niño que favorece el aprendizaje de nuevos conocimientos, incluso como complemento al trabajo que realizamos en cada unidad didáctica.

¿Qué es ABN?

La metodología ABN simplifica y conecta con el niño

Dentro de las metodologías para la lógico-matemática, el ABN: Este método consiste en trabajar aspectos matemáticos a través de situaciones reales, de forma manipulativa y con materiales de uso habitual. «La metodología ABN consiste en aprender a calcular, resolver problemas matemáticos y trabajar números y cantidades de una manera visual -aclara Adriana Pelayo, coordinadora de Bernabéu-. Este método se creó con la intención de llegar a todo el alumnado, con materiales reales y sencillos, que cualquier maestro pueda tener a su alcance».

Algunas características destacadas son:

Posee un carácter abierto, lo que significa que no hay un único camino para obtener un resultado, sino que se puede llegar al mismo de formas diferentes.

Se utilizan materiales como botones, palillos, etc. objetos del día a día a través de los cuales se desarrolla la competencia matemática.

Son actividades manipulativas y llamativas para el alumnado que ayudan a la comprensión matemática.

Se trabajan situaciones próximas a la realidad de los niños que puedan comprender y relacionar con el día a día.

Instalaciones amplias con luz natural en la escuela infantil de Madrid Alaria International Nursery Schools. Colegio bilingüe e internacional. Calle Pablo Aranda 16, el Viso, Chamberí. Aula o clase de Educación Infantil.
Todo ello da lugar a un método que convierte el aprendizaje matemático en una experiencia lúdica, motivadora y cercana, haciéndola menos compleja.

La metodología ABN simplifica y conecta con el niño

Dentro de las metodologías para la lógico-matemática, el ABN: Este método consiste en trabajar aspectos matemáticos a través de situaciones reales, de forma manipulativa y con materiales de uso habitual. «La metodología ABN consiste en aprender a calcular, resolver problemas matemáticos y trabajar números y cantidades de una manera visual -aclara Adriana Pelayo, coordinadora de Bernabéu-. Este método se creó con la intención de llegar a todo el alumnado, con materiales reales y sencillos, que cualquier maestro pueda tener a su alcance».

Algunas características destacadas son:

Posee un carácter abierto, lo que significa que no hay un único camino para obtener un resultado, sino que se puede llegar al mismo de formas diferentes.

Se utilizan materiales como botones, palillos, etc. objetos del día a día a través de los cuales se desarrolla la competencia matemática.

Son actividades manipulativas y llamativas para el alumnado que ayudan a la comprensión matemática.

Se trabajan situaciones próximas a la realidad de los niños que puedan comprender y relacionar con el día a día.

Todo ello da lugar a un método que convierte el aprendizaje matemático en una experiencia lúdica, motivadora y cercana, haciéndola menos compleja.

Cualquier situación real es una oportunidad de utilizar ABN

«Con ABN, se trabaja la descomposición y composición de números y la comprensión y realización de las operaciones matemáticas. Esta semana, por ejemplo, hemos trabajado ABN con los mayores el día de los Pelos Locos -explica Adriana-. La profesora Elena, de 5 años, creó un muñeco (ver foto) cuyo pelo tenía la familia del 50, es decir, los números que tienen la misma decena. Para repasarlos, los niños tenían que ir cortando el número que salía del bingo. Cuando acabamos, observamos la longitud de cada tira, para empezar a razonar y pensar en cuál era el número que más había o el que menos. También nos plantamos, estadísticamente, la frecuencia con la que salían los números».

¿A partir de qué edad se puede usar ABN como metodología?

En el caso de los niños de 2 años, se diría que ese trabajo de cálculo es más complicado. «Sin embargo, nosotros consideramos las primeras etapas de la infancia como la base de todo, ya que en estas edades estamos creando las primeras conexiones neuronales, por lo que nos adaptamos a la etapa evolutiva, pero también usamos ABN.

Un ejemplo, en 2 años, consistiría en la adaptación del cuento de «La oruga glotona», que cada día, en la asamblea, nos ayuda a ver el día de la semana que es. A través de los paneles visuales, los alumnos vivencian el paso del tiempo, según la oruga se va comiendo más frutas. Si hoy es miércoles, la oruguita se comerá tres frutas, porque es el tercer día de la semana; el jueves, cuatro… Esa representación la hacemos también con otros materiales, como los dedos, los números de un dado, caritas de la mascota… Todo nos sirve para entender y comprender una cantidad»- explica la coordinadora.

«Es más, aún sabiendo que, en esta edad, la atención dura entre 5 y 10 minutos con una actividad concreta, nos atrevemos a dar un paso más y nos vamos al panel del número protagonista y lo descomponemos, creando razonamientos lógicos con problemas muy sencillos que ellos puedan resolver manipulando objetos»- añade.

En ABN, todos los caminos son válidos

«Como resumen -concluye Adriana-, diría que esta metodología nos abre las puertas de un mundo nuevo en cuanto a matemáticas se refiere, porque los alumnos comprenden lo que hacen, disfrutan y, al contrario que metodologías más tradicionales, como la Singapur, el camino es abierto. Todos los razonamientos son válidos mientras se llegue al mismo resultado. Nuestros pequeños disfrutan de los números, del cálculo y se sienten capaces, que es lo más importante, porque, cuando yo no lo consigo, siempre están los materiales o un amigo para ayudarme».

Para más información

El autor del Método ABN (Algoritmo Basado en Números) es Jaime Martínez Montero, maestro y doctor en Filosofía y Ciencias de la Educación, que explica: “La idea de crearlo es más el resultado de toda una vida profesional en la que se ha trabajado con especial intensidad la didáctica de las matemáticas, que algo que se le ocurre a uno de repente”.